Si algo sabe hacer bien México es gestionar sus recursos turísticos. Tener en su territorio nacional grandes tesoros de la humanidad no es suficiente. Sólo haciendo una buena gestión de los mismos conseguimos atraer turismo de forma responsable y sostenible. A continuación platicaremos de dos grandes ciudades: Monterrey y Querétaro
Conscientes del poder de la industria turística y de la necesidad de preservar por generaciones futuras sus tesoros, México ha protegido su patrimonio y formado profesionales dedicados a la gestión turística.
El mejor ejemplo es la península de Yucatán. Desde hace muchos años acapara la mayoría del turismo caribeño gracias a todos los recursos de la Riviera Maya. Pero un país del tamaño y la importancia de México no puede depender de un sólo destino por espectacular que sea.
Con el objetivo de no concentrar el turismo en una única zona y no convertirse en un destino exclusivamente basado en el mar Caribe, México ha puesto en marcha diversas iniciativas para atraer a la población hacia otros puntos del país. Uno de estos proyectos es el denominado Pueblos Mágicos que potencia aquellos municipios con unos atractivos turísticos especiales, brindándoles recursos y promoción para que potencien su presencia.
Pero hay un nuevo turismo que se está empezando a desarrollarse en México. El turismo urbano de las grandes ciudades conseguido gracias a la transformación que encontramos en muchas de ellas. Aparte de Ciudad de México, varias urbes han trabajado para convertirse en lugares atractivos para los visitantes. Dos de estas ciudades son Santiago de Querétaro y Monterrey.
La capital queretana siempre ha gozado de un patrimonio histórico envidiable. Prueba de ello fue la inscripción de su zona monumental como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1996. Pero Santiago de Queretaro no quiere ser simplemente un destino de paso donde dedicar unas horas a fotografiar su catedral. Desde hace años se ha convertido en una de las ciudades con mayor calidad de vida y seguridad. Esto ha creado una incipiente población urbana con elevado nivel cultural, lo cual se hace notar en la oferta de ocio de la ciudad.
Santiago de Querétaro es la ciudad de México con más librerías por habitante, su oferta teatral es de las más completas y de mayor calidad del país y es un destino gastronómico cada vez más interesantes.
Monterrey por su parte, no quiso aceptar el papel de ciudad grande venida a menos. Una reconversión urbana total ha transformado a la capital del Estado de Nuevo León en una de las más modernas ciudades de México.
La reconversión de la Fundidora de Fierro y Acero en una parque y centro cultural, la construcción de la Macroplaza, sus grandes museos o la organización de eventos internacionales como el Forum Universal de las Culturas en el año 2007 dan prueba de que Monterrey se ha tomado muy en serio el nuevo siglo y se ha convertido en una de las grandes capitales culturales de México.
Desde luego que hay que visitar los tesoros caribeños de la Riviera Maya, el México más tradicional y auténtico de los Pueblos Mágicos y la vida intensa de Ciudad de México, la gran urbe latinoamericana. Pero en este siglo XXI, el México de la cultura y el desarrollo urbano se está viviendo en ciudades como Santiago de Queretaro y Monterrey.